Muchas personas que no pueden o no quieren pagar el precio de un reloj de marca de calidad se plantean la compra de una falsificación. Pero ¿merecen la pena? La respuesta es claramente que no. Para empezar, nos encontramos con diferentes tipos de falsificaciones. Las más habituales son las baratas, de muy mala calidad y que salta a la vista que tienen poco o ningún parecido con las originales. Solo tenemos que ver en un Distribuidor oficial Relojes Tissot en Vigo uno de estos relojes y no hace falta ni ser expertos ni tener el ojo entrenado para detectar que el otro es falso.
Estos relojes, evidentemente, no solo no se parecen en nada a los originales, es que además son de ínfima calidad en sus materiales y duran prácticamente horas. Pero ¿y las llamadas falsificaciones idénticas? Por mucho que digan, no existen falsificaciones idénticas. Incluso si el reloj se ve tan igual por fuera que no les damos distinguido, por dentro no se van a parecer en absoluto. En estos casos, nos vamos a encontrar con que pagamos un reloj falso, pero no a un precio que a fin de cuentas poco nos supone, sino a un precio elevado. Vamos a dar mucho dinero por algo que no tiene garantía alguna y que no sabemos cómo nos va a responder. O, mejor dicho, sabemos que no va a responder como un original.
En poco tiempo, el reloj acabará dando problemas y dejando de funcionar, por lo que nos habrá salido muy caro ya que el original puede durar toda la vida sin dar problemas o, al menos, muchísimos años antes de tener que realizar algún tipo de mantenimiento.
En otros casos, el reloj funciona, pero su aspecto externo que parecía tan bueno deja de parecerlo y los metales comienzan a perder brillo, o directamente algunas partes de lo que parecía metal se rebelan como plásticos de mala calidad. Nos encontramos con un reloj que, aunque todavía funciona decentemente, ya no nos sirve para poner porque en lugar de ser un complemento estético y bonito es algo que afea y que nos hace parecer descuidados.
Por último, no olvidemos que comprar algo falsificado es un delito y una falta de respeto al trabajo de muchos profesionales que han creado un reloj de alta calidad y con todas las garantías, un reloj que no nos saldrá caro al final.