Anímate a confeccionar tus propias cortinas

¡Cómo cambia una casa con unas cortinas nuevas! Es colgar unas cortinas nuevas, bonitas y modernas, y toda la estancia se transforma. Pero resulta bastante caro comprar cortinas confeccionadas porque no solo estamos pagando las telas, sino también el diseño y la mano de obra. 

Por eso, cada vez más personas se animan a fabricar sus propias cortinas ya que los materiales que se necesitan no son tantos ni tan difíciles de encontrar. Solo vas a necesitar una máquina de coser, hilo de calidad, la tela que te guste y ver el catálogo de los fabricantes de cintas de cortinas para elegir un tipo de cinta en función del modelo de cortina que desees.

Las más sencillas de realizar son las cortinas que se colocan en puertas y ventanas de pequeño tamaño, con una barra fina que va por el interior de un dobladillo de la cortina. La dificultad en estos casos es mínima. Solo hay que medir el cristal y añadir los centímetros necesarios para los dobladillos y las costuras. 

Es el tipo de cortina que encontramos con frecuencia en cuartos de baño, puertas de terraza o incluso en cocinas ya que al no tener ningún tipo de vuelo no abultan, no hay riesgo de que se manchen al volar sobre las cosas y no necesitan de instalación. Una vez hechas las cortinas se colocan en barras extensibles adaptables y están listas para ser colocadas.

En el extremo contrario tenemos las cortinas clásicas con rieles. Ya no las vemos en la mayoría de los hogares porque son sistemas complicados tanto para instalar como para confeccionar la cortina. En estos casos hay que comprar suficiente tela para que la cortina haga el vuelo que nos gusta, entre dos veces y dos veces y media del espacio que va a cubrir la cortina. Se le coloca una cinta que ajusta la tela y la frunce para crear el vuelo. Esa cinta ya dispone de los espacios para los ganchos con los que se colgará la cortina del riel.

Pero la mayoría de los hogares de hoy apuestan por las cortinas de ojales, muy cómodas y muy atractivas y que se realizan muy fácilmente gracias a las cintas con ojales que se compran ya elaboradas y que solo hay que adaptar a la tela. Estas cortinas se quitan y se ponen con facilidad, no necesitan frunces y resultan muy modernas y actuales.